Un tipo rescató uno de los viejos aviones de Howard Hughes y lo transformó en la casa flotante más genial de la historia
January 16, 2022
En un triste día de 1939, el afamado aviador Howard Hughes tomó su preciado Boeing 307 Stratoliner para su vuelo final. El llamado Flying Penthouse de Hughes no fue abandonado en el depósito de chatarra, más bien cayó en manos de Kenneth London, quien se dispuso a realizar algunos cambios drásticos en la nave. Primero, arrancó las alas… Luego lo hizo hermético… Finalmente, agregó un timón… Sí, London convirtió el viejo transatlántico en una casa flotante que
funciona, ¡y los resultados son absolutamente increíbles! Pero, ¿dónde comenzó todo para Flying Penthouse? Con la pasión de Hughes por los aviones, por supuesto. Sin embargo, el multimillonario tuvo sus dedos en muchos pasteles durante su vida, ya sea haciendo películas o inventando nuevos inventos. Y debajo de todo estaba el comportamiento inusual del hombre, que según los rumores fue alimentado por su trastorno obsesivo-compulsivo. Te seguimos contando detalles.